Ningún rastro de procedencia conserva el ejemplar con los comentarios de Ammonio de Alejandría sobre Aristóteles [13]. La naturaleza especializada de su contenido y su encuadernación boloñesa [enlace imagen], que afortunadamente no perdió tras su ingreso en la colección real, induce a pensar en un posesor con formación humanística, tal vez un maestro universitario del norte de Italia, capaz de leer griego.

El estilo boloñés en las encuadernaciones renacentistas del Quinientos se identifica por la preferencia de reservar únicamente el centro de los planos para insertar el título o un motivo ornamental en hierros dorados. El resto de la cubierta se adorna con orlas en seco de diversa inspiración figurativa.

Gracias a los trabajos, entre otros, de Hobson y Quaquarelli [1998] [Hobson, Anthony & Quaquarelli, Leonardo, Legature bolognesi del Rinascimento, Bologna, Clueb, 1998] y de Federico Macchi, podemos adscribir la encuadernación de esa edición aldina de Ammonio al entorno de los llamados «Maestros alla vignetta». Dentro de un grado de uniformidad que no siempre hace sencilla la diferenciación, han podido distinguirse al menos dos encuadernadores boloñeses «alla vignetta». El primero (ca. 1525-1545) proveía libros fundamentalmente a compradores italianos. Por lo general, este encuadernador reservaba el centro del plano anterior para inscribir, utilizando hierros dorados, el título inserto en un marco de inspiración vegetal con forma de losange. En el plano posterior pueden aparecer, también inscritos en un cartucho con motivos vegetales, tanto el emblema de un Cupido como el de la Fortuna con su vela. Este último icono, con variantes que pueden incorporar un delfín sobre el que cabalga la diosa o un fondo de estrellas, es recurrente también en otras ciudades del norte de Italia como Venecia, Padua y Milán.

El «segundo Maestro alla vignetta» (ca. 1526-1529) operaba a una escala menor. Hasta la fecha solo se han identificado seis encuadernaciones suyas, alguna, como la que viste la edición florentina de la Ulyssea. Batrachomyomachia. Hymni XXXII (Filippo Iunta, 1519), conservada en la Biblioteca Universitaria de Bologna (sign. Raro A. 56) con los mismos hierros para el losange vegetal de los planos que la ofrecida por el ejemplar de Ammnio de la Real Biblioteca. Fiel al acostumbrado esquema iconográfico que combina elementos dorados en el centro de las cubiertas enmarcados en una serie de orlas en seco, este ejemplar recurre en su figuración a una lira con volutas rematadas en hojas para componer la orla más externa de los planos. La interna, más estrecha, reproduce hojas multilobuladas de roble. Inscritos en sendos rombos lisos que hacen intersección con rectángulos, el título y el emblema de la Fortuna aparecen acompañados de dos rosetas bilobuladas en hierros dorados.

En el ejemplar de la Real Biblioteca se aprecian también las marcas de la perforación sobre las tapas donde en su día se insertaban tiras de seda para asegurar con un nudo el cierre del libro. Por los restos de tela que aún pueden apreciarse, estos comentarios de Ammonio se anudaron en seda azul verdosa, a juego con la tintura de los cortes.